Muchas de las entradas que escribo surgen de conversaciones con los alumnos, entre clase y clase, cuando están entrenando o estoy entrenando, siempre hay un ratito para charlar sobre los temas que nos unen. Pues ayer tuve una agradable charla con dos alumnos de la escuela infantil antes de comenzar su entrenamiento.
Una de las protagonista de la conversación, una alumna de 12 años que le gusta mucho el golf y participa asiduamente en nuestros entrenamientos y torneos que organizamos. Pero no empezó por el golf la conversación, empezamos a hablar de padel, me dijo que estaba empezando a jugar a este deporte en el colegio, en los recreos con los compañeros de clases les dejaban hacer partidos. Me decía que era muy mala jugando, yo le pregunte: ¿pero llevas mucho jugando? ¿has entrenado mucho como para ser buena? le dije que todos somos malos cuando empezamos a hacer algo hasta que pasamos unas cuantas horas ( no le iba a decir 10.000…igual se asustaba) practicando y jugando. Fue entonces cuando enlazamos la conversación con el golf, porque precisamente esta alumna en el último torneo escuela no jugó bien y lo paso bastante mal por el campo, incluso soltando alguna lagrimilla…esto no nos gusta, pero a veces es inevitable la frustración que pueden producir algunos malos golpes.
Con la intención de reforzar a esta alumna y también por la curiosidad sociológica que siempre me asalta, le empecé a preguntar por sus aficiones (mi intención era encontrar algo a lo que fuera buena). Me dijo que lo que le gustaba hacer, durante horas y horas (y mas horas los fines de semana) era ver videos en Youtube sobre videojuegos (nunca entenderé esta nueva afición de ver gente jugando a videojuegos sin jugar…pero bueno los tiempos cambian y hay que estar preparados) y también le gustaba muchísimo jugar a MINECRAFT, NOOOOOOOOOOOOOOOOOO! Estamos perdidos, pensé para mis adentros, para el que no lo sepa es un juego de ordenador de alto valor adictivo entre los mas jóvenes al que se pueden pasar jugando días sin levantar la vista de la pantalla, ya lo conocía de otros alumnos que me lo habían comentado. La pregunta estaba clara, ¿cual es tu nivel en MINECRAFT? La repuesta más clara aún, «soy super buena jugando a MINECRAFT». Lo único que pude añadir es: «SOY LO QUE ENTRENO», si pasaras las horas que empleas en ese videojuego en practicar padel o golf, las cosas cambiarían y mucho.
No nos estamos dando cuenta de como las nuevas tecnologías están influyendo en los más pequeños, creo que esto lo veremos y nos arrepentiremos de muchas cosas dentro de unos cuantos años. Por en mi experiencia personal me encuentro muchos niños que cuando les preguntas por lo que mas les gusta hacer, te dicen que es jugar a la tablet o estar viendo videos en youtube, esto preocupa y mucho. ¿De quien es culpa esto? Pues yo creo que de los padres, siiii, no se escondan, ya se que es más fácil darle un videojuego al niño y que no moleste más en toda la tarde (a no ser que se le acabe la batería jejeje) que llevarlo al campo de prácticas a que tire unas bolas o la cancha a que monte en bici. Además, lo que tenemos delante es un trabajo duro para los padres en la batalla deporte vs videojuegos. Hacemos una comparativa y ya con esto acabamos:
– Videojuegos: No me tengo que desplazar / no requiere esfuerzo físico / Si pierdo reinicio y vuelvo a empezar / nadie me molesta, no me tengo que relacionar / me aburro de un juego, pongo otro.
– Deporte: Implica desplazamiento / me canso, hay que moverse mucho / muchas veces me sale mal y no puedo «resetear».
Con los anteriores argumentos, ¿quien gana la batalla? Pues si entre todos no ponemos empeño, ganaran los videojuegos y yo no creo que sea bueno para el futuro de nuestros chicos.