Comer es un acto vital, necesitamos comer para vivir y funcionar en nuestro día a día. Como todas las máquinas, necesitamos una serie de sustancias para poder funcionar correctamente. Un coche necesita gasolina, aceite, líquido refrigerante , líquido de frenos….Una persona necesita proteínas, hidratos de carbono, grasas, vitaminas, minerales y agua.

La diferencia entre las máquinas orgánicas ,que somos la personas, y las máquinas de metal fabricadas por nosotros, es que a estas últimas se les proporciona única y exclusivamente lo que necesitan para funcionar, en estado puro y en las cantidades justas.Las personas tenemos que buscar nuestros nutrientes en una gran variedad alimentos sin saber exactamente las demandas de nuestro cuerpo ni en cual de estos alimentos encontrarlos. Esto, unido a que normalmente los criterios gustativos priorizan sobre los nutritivos a la hora de alimentarnos, hace que el aporte de combustible adecuado para nuestro organismo sea una tarea arduo complicada.

Os porpongo la siguiente pregunta ¿ qué pasaría sin un día llenarais el tanque de vuestro coche con Coca cola ? Creo que la respuesta ya os pasado por la cabeza…. ¿ Me equivoco? Pues bien, para que nuestro motor ( organismo) funcione perfectamente necesita unos macronutrientes y micronutrientes, a los que ya he hecho alusión anteriormente, y lo que no necesita de ninguna manera, incluso lo estropea, son el azúcar refinado y los carbohidratos de elaboración humana ¿ Hace falta que aclare a donde quiero ir a parar?

Ahora te voy a mencionar donde puedes encontrar el combustible adecuado para tú cuerpo, es bien simple: carne,pescado,mariscos, aves,huevos,verdura,fruta, frutos secos, aceites, legumbres y cereales.También te voy a mencionar donde no los vas a encontrar: pan blanco, bollería y dulces, pasta, arroz, cereales industriales, preparados, refrescos, bebidas alcohólicas…

Creo que todos sabemos lo que debemos comer para estar sanos , fuertes y sin exceso de peso, aunque haya muchas teorías y dichos populares sobre la comida, todos somos conscientes y sabemos lo que hay.

Este pequeño desarrollo lo he hecho única y excluisvamente para plantearos el conflicto que tuve el otro día, cuando me iba a pedir el postre del menú del día en el Restaurante Hermanos Garcia, el cual os recomiendo por si quereís tener la posibilidad de comer, sano y abundante, un día que no podáis ir a casa. Tras haberme zampado un excelente y abundante salpicón de marisco y dos chuletas de cerdo con verduras , el camarero se me acerca y me pregunta: » ¿Algo de postre?» Me enumeró todos los postres , cada cual más apetecible, pero yo me había quedado con este sonido retumbando en mi cabeza: » mousse de bizcocho de Moya» ¡Está de muerte!

Ese día yo ya le había empezado la guerra al azucar refinado, «No lo voy a comer más», y iba con la idea preconcebida de pedir fruta de postre. Así que dije: » Una manzana por favor»

Cuando el camarero fue a por mi manzana, me quedé preguntándome: » ¿Estoy rechazando un mousse de bizcocho de Moya, con lo bueno que está, por una misera manzana?».En ese momento fue cuando se me encendió el farolillo rojo y mi mente automáticamente se planteó lo siguiente:» Esto es el mundo al revés, un sin sentido, donde para rechazar un mousse de bizcocho de Moya , que no aporta nada bueno a mi organismo, por una manzana, llena de nutrientes, tengo que hacer un esfuerzo increíble. A ver Zach piensa , razona…como te vas a comer un mousse de bizcocho moya, que es veneno para tu cuerpo, en vez de una manzana que tiene muchísimas propiedades beneficiosas. En un mundo coherente ¿ Donde debería estar la dificultad? ¿En rechazar lo nutritivo o lo destructivo? «. Este fue mi planteamiento, después de hacerlo me comí la manzana,quedandome completamente sarisfecho y realizado. Como diría un amigo mío: «Es de loooocos»