oficinas pingLa semana pasada tuve la oportunidad, gracias a la Tienda D-sport, de desplazarme a las instalaciones que tiene la marca Ping Golf para surtir de material a toda Europa, Sudáfrica y los Emiratos Árabes. Las instalaciones están en una pequeña localidad llamada Gainsborough, al norte de Londres muuuuuuyyyy al norte de Londres (2 horitas y media en coche). Sabía que iba a ser un viaje duro, vuelos, conexiones, coche, madrugones… pero también sabía que merecía la pena ver como trabaja una gran empresa como Ping.

Los tres días del viaje consistirían en visitar todas las instalaciones que Ping posee allí: 2 campos de golf, casa club , fábrica de palos, oficinas, etc…, introducirnos en la historia de la marca, acercarnos a su filosofía de empresa, presentarnos todo el material que la marca trabaja y formarnos sobre la realización de palos a medida (fitting). La verdad, que las instalaciones son fantásticas, tienen dos buenos campos, un bonito pro-shop, unos apartamentos para alojar a los visitantes, un Fitting Center espectacular y unas oficinas totalmente renovadas, todo muestras de una empresa que funciona bien. Lo único malo, que el clima y la Gastronomía del lugar no son de las mejores del mundo. Bueno, después de esta pequeña introducción vamos a desengranar todo lo que dieron de si esos tres días con los chicos de Ping.

DIA 1

Los siete integrantes del grupo llegamos al aeropuerto de Stansted (Londres) y allí nos espera el conductor ( Tom, un agradable ingles de unos 80 años) de Ping que nos llevará a Gainsborough.  Una vez allí, y después de comer algo nos llevan a las oficinas donde tenemos una sesión de Historia de la marca. Ping Golf es una empresa con mucha tradición, fue fundada en 1959 por un ingeniero aeronáutico Norteamericano llamado Karsten Solheim (si, es el hombre que le da nombre a la «Ryder» femenina, la Solheim Cup). El señor Solheim empieza a diseñar y fabricar palos después de empezar a jugar y darse cuenta de lo difícil que era este deporte, su intención, diseñar un material que facilitara el juego, y en mi opinión lo consiguió. Paul, el encargado del Fitting centre, fue la persona que nos acompaña y enseña todo.

Las oficinas, nuevitas nuevitas, se dividen en varias zonas: Un bonito recibidor, la zona de despachos, salas de reuniones, salas de montaje y logística y una zona de descanso. Esta última zona de descanso es parte de un proyecto nuevo que lleva la empresa para mejorar la salud y el bienestar de los empleados. Es una zona muy amplia con sillones, mesas, ordenadores etc… donde esta prohibido hablar de trabajo, se hacen sesiones de pilates y se sirve comida saludable. Cada empleado tiene un bonus económico si entra dentro de este programa saludable de la empresa.

Después de hacernos todo el recorrido histórico de la marca, de donde nace, como ha evolucionado, como es su filosofía de empresa orientada a la satisfacción de consumidor y hacernos un pequeños obsequio de bienvenida, como no podía ser de otra manera, nos vamos a la zona de montaje de palos, no sin antes advertirnos que no podemos hacer fotos de esta zona ya que hay productos que se están montando que todavía no han salido al mercado (los vimos, y tienen muy buena pinta).

regalos ping

La zona de montaje es una pasada, una cadena de producción muy bien engrasada, produciendo palos a medida uno detrás de otro y lo más increíble de todo: cada palo es único, esta acabado por la mano del hombre y tiene un número de serie único. Esto garantiza la calidad del producto. La idea preconcebida que yo tenia era la de una fábrica totalmente digitalizada y mecánica, pero lo que me encontré fue algo muy artesanal y con mucho encanto, por supuesto con un gran apoyo de la tecnología más avanzada. Me gusto ver como cada grip, cada varilla cada lie/loft esta manipulado por el hombre, esto dice mucho del producto final que obtenemos.

Con esto se acaba la primera jornada.

DIA 2

fitting centre pingDespués de un «Full english breakfast» nos desplazamos al Fitting Center de Ping. Cuando entro, solo puedo decir: «WOW! yo de mayor quiero tener una instalación como esta», infinidad de palos, varillas, radares Trackman, un acogedor saloncito, putting green artificial, vamos, unas instalaciones perfectas para hacer fitting y enseñar golf. Durante la mañana Paul nos explica y pone en práctica su metodología para hacer los palos medida. Empezamos con el fitting estático donde aprendemos a coger medidas y a entrevistar al jugador en busca de sus preferencias (Ellos siempre dicen que hay que escuchar lo que el jugador tiene que decirnos), para después proceder a hacer el fitting dinámico a través del análisis del vuelo de la bola.

Tengo la oportunidad de hacerme un fitting de Driver, y la verdad que fue muy curioso, la recomendación que me hicieron después de probar muchas cabezas y varillas fue una cabeza de 12º con una varilla x-stiff de 76 gramos (bastante pesada). Esta combinación me dio mucha consistencia, todas las bolas muy parecidas y en contra de lo que puedan pensar, a pesar de los 12º la bola no iba nada alta. Que importante es deshacerse de los cliches y probar cosas nuevas, yo siempre había querido drivers de 7º u 8º ya que el vuelo de mi bola es alto, claro, la clave estaba en la combinación de la cabeza con la varilla.

Por la tarde nos llevan nuevamente a la fábrica para ver un pequeño despacho donde hay un operario que hace los caprichitos de los clientes. Aquí es donde hacen todos los encargos de los jugadores del tour y todos los ajustes más detallosos, del tipo; poner una banderita pintada en las letras del palo, grabar las iniciales del jugador o poner alguna varilla más especial. Tuvimos en este momento una oportunidad muy interesante que fue la de hacer un juego de palos, hicimos el último paso de la cadena de montaje: ajustar el lie y loft de cada palo. No os imaginaríais que hasta esos palos que parecen tan delicados se ajustan a martillazos hasta conseguir los grados que te marca una precisa máquina. Pude ajustar un hierro 8 modelo I25 punto rojo que jugará algún señor por los campos británicos, jajaja.

DIA 3

Último día en «Pinglandia» que nos recibe con otro «Full english breakfast» solo apto para los estómagos más tolerantes. Pasamos toda la mañana en el Fitting Center viendo como los «Fitters» de Ping trabajan con los clientes locales, tuve la oportunidad de ver unos 5 fittings a diferentes jugadores y por supuesto de aprender muchas cosas viéndolos. Hubo uno de ellos que me causo especial interés. Un chico joven, alto y atlético que no la rascaba, con un hierro 7 su bola no marcaba mas de 80 metros en el Trackman, cuando vi estos datos pensé ¿Es realmente necesario el radar para todos los fittings? Yo veia al chico de Ping mirando el ordenador y analizando las bolas que iban exactamente igual de mal pegadas y pensaba ¿No bastaría solo con un fitting estático para este tipo de jugador? Mi respuesta es que SI. Creo que nos están creando una dependencia de los radares y que para trabajar con la mayoría de los golfistas mortales no es tan necesario e imprescindible como últimamente se dice, pienso que con jugadores de alto nivel si son muy muy importantes.

Por último y para acabar, dar las gracias a Borja (Fitter de la marca para España y Portugal) que fue quien organizó todo el viaje y se ocupo que no nos faltará de nada durante los 3 días en Londres.