No se pueden imaginar lo importante que es una buena alineación para hacer un buen swing de golf. Muchas veces el movimiento que un jugador hace esta fuertemente condicionado por una buena o mala alineación previa.
Queridos amigos: No es lo mismo querer apuntar a un sitio que apuntar realmente a ese sitio. En muchas ocasiones, incontables, los alumnos que vienen a la escuela para mejorar su rendimiento tienen un problema serio de alineación. Lo primero que hago es pedir al jugador que intente enviar su bola a un sitio, el cartel que marca los 100 metros por ejemplo. Yo, colocándome detrás, puedo ver perfectamente si la alineación es apropiada, o no. La sorpresa de los jugadores cuando piensan que apuntan a un sitio y ven que realmente apuntan a otro es mayúscula, muchos no se la creen. Además se suma un factor, adonde sale la bola. Claro, si yo creo que apunto a un sitio, en realidad estoy apuntando a otro y mi bola sale al lado contrario… JODER! la que hemos liado, ¿como le pones remedio a esto? pues con paciencia y buenos hábitos que así es como se arregla casi todo.
Yo soy partidario de que la alineación no debe ser perfecta, hay un factor humano, de compensaciones, de sensaciones que hace que podamos ser flexibles en este tema, no somos francotiradores con una mira telescópica. De hecho, vemos a los jugadores de golf profesionales, los que salen por la tele, los que realmente le pegan bien, que no todos se alinean igual delante de la bola. Lo que si hay que evitar es una mala alineación que condicione el buen movimiento que queremos hacer. El fallo más habitual que vemos (un 99,8% de las veces, no pongo 100% por no sonar pedante) es, en el que el jugador queda cerrado con respecto al objetivo, quiere decir que su cuerpo apunta muy a la derecha con respecto adonde quiere mandar la bola, vemos el pie izquierdo muy por delante del derecho (en caso de jugadores diestros), combinado con los hombros en el mismo sentido, o al contrario, abiertos. Para que os hagáis una idea, este fallo de alineación lleva al jugador a no poder hacer un buen desplazamiento, un buen cambio de peso, si el jugador se moviera bien ¿adonde irá esa bola? pues a donde realmente apunta, a la derecha. Para evitar eso, los jugadores se giran en exceso hacia la izquierda cortando la bola y pegando golpes débiles.
Para acabar, quiero dejar algunos consejos que pueden ayudar a que un jugador mejore su alineación:
1. Que alguien supervise tu alineación. Un compañero o un profesor debe ayudarte en este aspecto, si uno esta solo, la alineación pasa a ser algo completamente subjetivo y es posible que haya un desajuste (en muchos casos grande). Para convertir el apuntar en algo objetivo es muy bueno tener la ayuda de alguien.
2. Entrenar una rutina de alineación. Muchas veces el jugador entra con prisas a la bola, y a veces ni mira donde quiere enviarla. Con un simple proceso podemos mejorar esta habilidad de apuntar donde realmente creo que apunto. Mi propuesta es: primero coloca la cara del palo y asegúrate que apunta al objetivo (recuerda que no eres un francotirador, puede haber un margen de error), después coloca tu cuerpo con la sensación que esta un poco a la izquierda del objetivo.
3. Usa una varilla o un palo para tener una referencia de donde estas apuntando. Poner algo en el suelo que nos diga donde estamos alineados va a ayudar enormemente a evitar desajustes, saber que aunque la bola no salga al objetivo estoy apuntando bien. Podemos, incluso, tener siempre el mismo objetivo y entrando y saliendo de la colocación en cada golpe, volviéndonos a alinear será un entrenamiento cojonudo.
La bola en el campo sale donde apunto. No, la bola en el campo sale donde tu crees que estas apuntando. No es lo mismo y afectará en la calidad del golpe.