Esta entrada que escribo es producto de un largo e intenso invierno en nuestra escuela de golf. Muy lejos de nuestro agradable clima primaveral del cual hemos presumido tanto «contra» nuestros compatriotas peninsulares, estos meses, los canarios estamos sufriendo muchas semanas de frío, nubes y lluvias. Nos tiene un poco hartos la verdad, pero a todo hay que sacar una lectura positiva y de todo hay que aprender algo.

Yo tengo dos anécdotas sobre las cual he estado reflexionando y creo que debo compartir:

1. Los niños Finlandeses que no tenían miedo a la Lluvia.

La-casa-FinlandiaIncreíble! Hace unas semanas estaba dando clases a dos niños finlandeses (8 y 10 años) y me enseñaron una buena lección.  Teníamos una clase de dos horas y como no, ese día también llovía. Yo les había prometido que íbamos a salir jugar al campo después de los correspondientes ejercicios en la zona de práctica. Pues para allá que vamos (por supuesto mis alarmas habían saltado y yo había ido a coger el paraguas), en el hoyo 3 empieza a caer una lluvia apocalíptica, yo como buen canario me quedo paralizado debajo de mi paraguas para esperar a que pare ¿Que hicieron Otso y Eino? Seguir jugando al golf como si no pasara nada. Yo les dije que si querían, podían cubrirse debajo de mi paraguas a esperar a que parará de llover, ellos me contestaron que eso no era lluvia fuerte, que estaban acostumbrados y que estaban bien.

Pues así seguimos jugando y para mi sorpresa no les paso nada, no encogieron, no les subió la fiebre a 40º y los días siguientes pudieron venir a clase sin ningun problema. La conclusión que saco es que todo en esta vida es relativo, a mi me parecía una brutalidad, para esos simpáticos renacuajos rubitos no era nada. Si hubiéramos hecho caso de mi alarma canaria nos hubiéramos metido en la casa club y no hubiéramos disfrutado de esos hoyos.

¿Cuantas veces los padres habrán privado a sus hijos de una actividad porque parece que va a llover o porque esta lloviendo? Repito que Otso y Eino era de Finlandia, no de otro planeta. Jugar bajo la lluvia puede ser una experiencia muy enriquecedora.

 

2. Un torneo escuela bajo el diluvio universal

Diluvio Universal golfTodos los sábados por la tarde en nuestra escuela hacemos un torneito donde los alumnos pueden competir, conocerse y poner a prueba sus habilidades adquiridas. El sábado pasado tocó, como ya viene siendo habitual en las Islas Canarias, mal tiempo y lluvia.

Cuando íbamos a hacer el reparto de tarjetas y la gente debía ir a sus hoyos de salida empezó a llover un poco. En este momento Javi y Yo hicimos una rápida  reunión y decidimos que «Aquí se juega al golf lloviendo», decidimos dar ejemplo a los alumnos y que pareciera como que la lluvia no nos afectaba, si, estaba lloviendo ¿Y que?. Aunque algunos estaban deseando una suspensión (se les notaba en el rostro) se hizo el reparto de tarjetas, se contagio un espíritu épico-deportivo y la gente se dirigió a las salidas para comenzar a jugar. El torneo fue complicado, lento e incómodo en algunos momentos, pero hicimos el torneo como un día normal y no hubo ni un solo retirado, todos acabaron de jugar. Bravo por ellos!

Sin duda, para estos jugadores ha sido una gran experiencia, se han dado cuenta de muchas cosas importantes cuando juegas al golf lloviendo y otra vez, nadie sufrió daños irreparables por mojarse «un poco» jugando al golf. La pregunta de la gente siempre cuando llueve o hay posibilidades de que llueva es ¿así se juega al golf? Pues ya lo saben: Aquí se juega al golf aunque llueva, no es como el caso de los escoceses que juegan aunque haga sol.

Es cierto que mojarse es incómodo y que viviendo en canarias, con nuestro clima habitual podemos permitirnos el que si hace malo nos resguardemos y esperemos a otro día que haga mejor tiempo. Por el contrario, en Finlandia no es así, si pararan de hacer algo cuando llueve o hace frío, no harían nada. Pero, señores, estén preparados por si este es el primer duro invierno de muchos, debemos acostumbrarnos a disfrutar de esas inclemencias. Lo más importante para mi, estar bien equipado: paraguas, ropa adecuada al clima y a jugar!